En el estreno de Quique Setién como entrenador del FC Barcelona ante el Granada (1-0), el Barça alineó en un principio a seis jugadores de ‘La Masia’. Sergi Roberto, Piqué, Jordi Alba, Busquets, Messi y Ansu Fati partieron de inicio en el duelo ante el conjunto nazarí, a los que se sumaron Riqui Puig y Carles Pérez en la segunda mitad.
La única novedad en el once fue la entrada de Ansu Fati ante la baja del lesionado Luis Suárez, pero el técnico cántabro se arriesgó con Riqui Puig cuando el partido se encontraba 0-0 a veinte minutos del final.
Una decisión que acabó siendo decisiva, ya que el centrocampista de Matadepera propició el robo de balón que acabaría culminando Leo Messi. Además, Setién quiso dar entrada a Carles Pérez por Ansu Fati haciendo valer lo que dijo en rueda de prensa y por lo que se vio en los entrenamientos durante la semana probando a diferentes jugadores de la cantera culé.